Chiapas, un sexenio que no termina de irse, y un gobierno que no quiere sentarse

Ángeles Mariscal

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Lunes 10 de Junio, 2013

 

 

Si pensó que ganaba un galardón que le permitiría ir subiendo en la escalada política que lo ha llevado a la gubernatura de Chiapas, con 32 años de edad, se equivocó. Manuel Velasco Coello, el “gobernador más joven de México”, como le gusta que lo llamen, lleva seis meses en el gobierno, sin lograr definir una política de gobierno, una estrategia económica y de desarrollo, y un gabinete propio.

Eso parece no interesarle. Su línea discursiva, el enfoque de los eventos públicos que encabeza, su promoción de imagen, y sus fines de semana privados, no distan mucho de lo que han sido desde el periodo en el que inició de manera abierta la campaña por la gubernatura. El gobernador sigue en campaña, es una crítica que diversos sectores le han hecho a través de las redes sociales.

Una voz aniñada, discursos llenos de palabras comunes y frases hechas, y un sinfín de fotografías de un joven sumamente delgado, que se deja abrazar por mujeres y niños, pero cuya mirada se pierde en el horizonte y parece ajeno a cualquier entorno, es la imagen pública que ha mantenido Manuel Velasco en sus seis meses de gobierno.

A ello se suma su afición por proyectarse a través de las llamadas “revistas del corazón”. Luego de su nombramiento como gobernador, ha sido sujeto de portada en las publicaciones Hola, Quien, Rostros, TVNotas, y otras, en donde aparece con su novia, la cantante Anahí.

Los fines de semana que ha pasado en reuniones privadas y festejos con jóvenes hijos de los hombres más ricos de México, también han sido registrados por esas publicaciones.

En Chiapas, una tierra donde está fuertemente arraiga la cultura machista y la figura del un patriarca fuerte como guía, moral y espiritual, la imagen que en estos primeros seis meses de gobierno proyecta el “gobernador más joven” de México, sólo ha levantado bromas entre la población civil, y pasiones políticas prematuras para una sucesión adelantada.

Otros hijos de políticos de vieja trayectoria, como Noé Castañón, Roberto Albores Gleason; e incluso políticos jóvenes que llegaron a diputaciones o alcaldías través del Partido Verde Ecologista, como el presidente del Congreso, Luis Fernando Castellanos CalyMayor, están creando fundaciones y promoviendo su imagen personal.

Lo que menos les interesa son las  propuesta o planteamiento de fondo sobre el desarrollo de la entidad; ellos miran su próximo cargo para el 2015, 2018 o, si se puede, antes. .

Chiapas es un estado donde los problemas de pobreza, justicia, desarrollo, y recientemente fuertes peligros de seguridad;  son el fondo, la forma y el todo en Chiapas. Por ello, la falta de una clase política trabajando en superar estos rezagos, lo que ha creado es la exacerbación de conflictos, la falta de autoridad y la aplicación de la justicia por propia mano.

 Como si el escenario así no fuera suficientemente adverso, aún hay que sumarle los grupos políticos y los funcionarios del ex gobernador Juan Sabines Guerrero, quienes abiertamente mantienen sus cuotas de poder.

Los rostros más visibles de este sector son Raciel López Salazar, Procurador de Justicia desde el sexenio anterior. Sobre él, Manuel Velasco ha dicho: “mientras siga manteniendo la seguridad en el estado, no tengo porque cambiarlo”.

También Noé Castañón padre, Secretario de Gobierno de Juan Sabines, y ahora de Velasco Coello. El encargado de la política interna del estado sostiene: “yo no gano nada acá, un estado con tantos problemas. En el momento que el gobernador me lo pida, me voy”. Y ahí permanece.

A estas dos piezas claves en cualquier gobierno, se suma el de funcionarios de nivel medio, entre ellos Chema Aguilera, cuñado del ex gobernador, quien es inversor en empresas que ahora obtienen sus ganancias promocionando la imagen de Manuel Velasco.

Pesa más la esposa de Sabines Guerreo, Isabel Aguilera, presidenta del Partido Orgullo Chiapas POCH), un órgano político creado por el ex gobernador para movilizar a colonos y grupos de bajos recursos, en manifestaciones, mítines, elecciones y demandas a modo.

Isabel Aguilera sigue dirigiendo al partido, “por videoconferencias y por teléfono”, sostuvo Mercedes León, representante de ese órgano político ante el Instituto de Elecciones local. A su decir, la esposa del ex gobernador también financia las acciones del POCH… con recursos públicos.

Es este el escenario chiapaneco, con un sexenio que no termina de irse, y un nuevo gobierno que no termina de asentarse, los conflictos inherentes al rezago económico, social, de justicia, no tardará en estallar, creando el ambiente propicio para una sucesión adelantada.